El debate sobre la frecuencia con la que debemos cambiar y quitar el polvo de la ropa de cama se ha convertido en un inesperado motivo de polémica en las redes sociales. Este artículo analiza las recomendaciones de expertos y gente corriente, explora diferentes enfoques y revela por qué es importante cambiar el revestimiento con regularidad.
En las redes sociales la gente suele entablar acaloradas discusiones que no sólo tratan de política, sino también de actividades cotidianas como cambiar y lavar la ropa de cama. ¿Con qué frecuencia cambias y lavas personalmente tus sábanas? Intentamos preparar un artículo que revelara lo que dicen los expertos y la gente común al respecto, pero nos encontramos con un hallazgo sorprendente. Después de revisar la información disponible, descubrimos que no existe una regla universal. Hemos encontrado varios procedimientos «probados».
Extremo: todos los días
Aunque esto pueda parecer extremo, hemos descubierto discusiones en las redes sociales donde algunas personas sostienen esta opinión. Sin embargo, este enfoque es más típico entre las mujeres de EE. UU., mientras que en la República Eslovaca no hemos observado tal práctica.
Una vez por semana
Esta frecuencia es muy popular entre los checos. Cuenta con el apoyo de autores reconocidos como Martha Stewart de Good Housekeeping, pero también Melissa Maker, autora de la guía estadounidense de limpieza – Clean My Space. Sin embargo, cuando miramos el entorno eslovaco, encontramos que esta práctica es igualmente popular.
Una vez cada dos semanas
Este intervalo es más común en Eslovaquia que en Estados Unidos. Quizás esto se deba al hecho de que las mujeres estadounidenses admiten que a menudo no lavan ellas mismas la ropa de cama, sino que recurren a servicios de lavandería y tintorería. En Eslovaquia la mayoría de la gente trabaja en casa, lo que puede ser la razón del mayor intervalo entre lavados.
Una vez al mes
Este intervalo es sorprendentemente popular. La gente suele mencionar el trabajo, la falta de tiempo o los problemas de secado y almacenamiento como los principales motivos. Es interesante que los hombres se reportan con mayor frecuencia en este grupo.
Más de una vez al mes
La mayoría de los hombres admiten que se cambian la ropa interior con menos frecuencia. Las mujeres, por el contrario, suelen expresar incredulidad, ya que otras tardan más en lavarse. Una investigación en Gran Bretaña mostró que los hombres solteros se cambian de ropa una vez cada cuatro meses, mientras que el 12% de ellos dijo que podría ser incluso más tiempo.
Batallas en redes sociales
La próxima vez que veas una discusión en las redes sociales sobre el lavado de sábanas, detente y observa. Verás que la gente es capaz de entrar en discusiones apasionadas incluso sobre estos temas.
¿Por qué cambiar las sábanas?
Durante el sueño sudamos, y no poco: hasta dos litros de sudor, que se filtran en el pijama. Además, en las sábanas queda piel muerta, que junto con los ácaros, el polvo, el pelo y la suciedad de la ropa crean un ambiente ideal para los alérgenos. En nuestras camas se pueden encontrar hasta diez millones de ácaros.