¡Sin pasas! La abuela añade un ingrediente especial al pastel de queso. Desaparecerá hasta la última migaja.
¿Qué se le puede añadir a la tarta de queso en lugar de pasas? Puede haber muchas ideas. Sin embargo, mi abuela lleva años utilizando el repuesto original. Este año hice lo mismo y no me arrepiento. Los invitados se emocionaron y pidieron la receta.
La tarta de queso con pasas es una deliciosa y clásica variación de este popular postre, que te deleitará por su consistencia cremosa y su delicado sabor. La adición de jugosas pasas le aporta dulzura y ligereza, creando una combinación perfecta de sabores. Sin embargo, vale la pena sustituirlo por algo más interesante y sorprender a tus invitados.
¿Qué se le puede añadir a la tarta de queso en lugar de pasas? ¡Usa arándanos!
Nuestras abuelas suelen utilizar modificaciones no tradicionales de recetas tradicionales y adaptarlas a sus propias preferencias gustativas. Si queremos mejorar nuestra tradicional tarta de queso, utilizaremos una variante interesante de generaciones mayores y añadiremos arándanos a la cocción en lugar de pasas.
Este cambio le da al producto horneado un sabor ligeramente ácido y contrasta perfectamente con el dulzor de la tarta de queso. Además, los arándanos aportan al postre una frescura única y un delicado aroma afrutado, que puede suponer un agradable cambio respecto a las tradicionales pasas.
Receta de tarta de queso con arándanos. Sorprende a tus invitados
Esta original tarta de queso con un ingrediente secreto la podemos preparar fácilmente en casa. Aquí están los ingredientes necesarios.
Parte inferior
200 gramos de galletas
80 g de mantequilla derretida
Mezcla de quesos:
500 g de queso blanco (por ejemplo, requesón)
3 huevos
3/4 taza de azúcar
1/2 taza de crema agria
2 cucharadas de harina de trigo
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 taza de arándanos (frescos o congelados)
Jalea de arándanos:
1 taza de jugo de arándano
2 cucharadas de azúcar
1 paquete de gelatina
Instrucciones para preparar el bizcocho:
Precalienta el horno a 180°C. Engrasa el molde de tarta de queso con mantequilla.
- Prepara el fondo. Tritura las galletas y luego mézclalas con la mantequilla derretida. Pon la mezcla en el molde, nivela el fondo y presiona uniformemente en el fondo del molde. Coloca el molde en el frigorífico para fijar el fondo.
- En un recipiente aparte, prepare la mezcla de cuajada. Mezcle el requesón, los huevos, el azúcar, la crema agria, la harina de trigo y el extracto de vainilla hasta que quede suave. Agrega suavemente los arándanos.
- Saca el molde del frigorífico y vierte la mezcla de cuajada sobre la base preparada.
- Hornea la tarta de queso en el horno precalentado durante aproximadamente 45 a 50 minutos, o hasta que la parte superior esté ligeramente dorada.
- Después de hornear, apague el horno y deje la tarta de queso en el horno durante unos 15-20 minutos para que se enfríe un poco. Luego retira la tarta de queso del horno y déjala enfriar por completo.
- Prepara la gelatina de arándanos. Calentar el jugo de arándano con el azúcar agregada en una cacerola. Añadir disuelto
- gelatina según las instrucciones del paquete. Remueve suavemente hasta que la gelatina se disuelva por completo. Deja enfriar la gelatina.
- Cuando la tarta de queso se haya enfriado por completo, vierte encima la gelatina de arándanos enfriada.
- Coloca la tarta de queso en el frigorífico y deja reposar la gelatina durante al menos 4 horas, preferiblemente durante la noche.
Antes de servir, decora la tarta de queso con trozos de arándanos frescos u hojas de menta. Buen provecho
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