Consejos útiles

Así nuestras abuelas se libraron de la enfermedad en una noche. Solo mojate los pies

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Nuestras abuelas tenían sus recetas probadas para combatir los resfriados. Uno de ellos es el uso de la mostaza, que muchos conocemos hoy en día como ingrediente de los encurtidos, pero sus efectos van mucho más allá. Gracias a las semillas de mostaza, es posible ayudar al organismo en la lucha contra las infecciones, en tan solo una noche.

Los efectos milagrosos de la mostaza blanca.

Las semillas de mostaza se utilizan a menudo en conservas o como parte de adobos, pero aún se subestiman sus efectos beneficiosos para el organismo. Sin embargo, su uso no queda sólo en la cocina, pues la mostaza tiene muchos efectos beneficiosos para nuestra salud. Gracias a su rico contenido en vitaminas, aceites esenciales y ácidos grasos aporta diversos beneficios para la salud.

¿Cuáles son los efectos de la mostaza sobre la salud?

La mostaza blanca favorece la digestión, alivia el estreñimiento, tiene efectos diuréticos y puede proteger la mucosa gástrica. También tiene propiedades antiinflamatorias y puede ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones. La mostaza también tiene un lugar importante en la medicina alternativa, donde se utiliza tanto interna como externamente.

¿Cómo utilizar mostaza?

Para problemas digestivos, se recomienda beber 1/3 de taza de decocción de semillas de mostaza hervidas después de las comidas. Esta sencilla bebida puede ayudar a aliviar los problemas digestivos. Para las molestias reumáticas, puedes poner semillas de mostaza trituradas en una bolsa o calcetín y aplicarlas en la zona dolorida, lo que aporta alivio.

Receta tradicional para el resfriado: Baño de pies con mostaza

Una de las recetas probadas de nuestras abuelas para el inicio de un resfriado es un baño de pies en agua caliente con mostaza. Este sencillo método ayuda con los primeros síntomas de la enfermedad y puede detener el desarrollo de un resfriado.

¿Cómo preparar un pediluvio con mostaza?

  • Vierta 1-2 litros de agua hirviendo en un recipiente más grande.
  • Agrega 1-2 cucharadas de semillas de mostaza trituradas o molidas.
  • Espere hasta que el agua alcance la temperatura óptima y sumerja sus pies en el baño preparado durante 20-30 minutos.
  • Después del baño, acuéstese inmediatamente en la cama para mantener el cuerpo caliente.

¿Por qué funciona?

La mostaza contiene sustancias que tienen un fuerte efecto antiinflamatorio y calentador. Estos ingredientes activos ayudan a dilatar los vasos sanguíneos, lo que favorece la circulación sanguínea y alivia los síntomas del resfriado. Nuestras abuelas creían que la enfermedad se puede «eliminar con el sudor». Un baño de pies con mostaza puede resultar eficaz especialmente en las fases iniciales de un resfriado y prevenir el desarrollo de la enfermedad.

Otras alternativas si no tienes mostaza

Si no tienes semillas de mostaza a mano, una alternativa es un baño de pies con sal. Basta con añadir unas cucharaditas de sal común en un recipiente con agua tibia. De esta manera se consiguen efectos de calentamiento similares y se relajan los vasos sanguíneos, lo que puede aliviar la congestión nasal. Al mismo tiempo, la sal del Himalaya aporta al organismo los minerales necesarios. Este baño es ideal antes de acostarse para calentar el cuerpo y apoyar el proceso de recuperación.

Otra alternativa es utilizar jengibre fresco, conocido por sus efectos cálidos. Sin embargo, es necesario prestar atención a su cantidad, porque demasiado jengibre puede quemar o irritar la piel.

En breve

La mostaza no sólo es un excelente ingrediente alimentario, sino que también tiene muchos beneficios para la salud. Ayuda con problemas digestivos, alivia dolores articulares y es excelente en la lucha contra los resfriados. Nuestras abuelas sabían que un baño de pies con mostaza o sal es una forma eficaz de frenar un resfriado en sus primeras fases. No debemos olvidar esta receta tradicional porque puede brindar un alivio rápido y favorecer nuestra salud.

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Marina García
¡Hola! Soy Marina García, escritora de arte de la jardinería, amante de la cocina y defensora entusiasta de los consejos útiles.