Los eslovacos buscan alternativas más económicas a la mantequilla. Encontraron soluciones más ventajosas en repostería
La mantequilla, que es la base de muchas recetas populares, ya sean saladas o dulces, se está volviendo inasequible para muchos. Hay varias razones: los altos precios, diversas intolerancias alimentarias, pero también el esfuerzo por elegir soluciones más ecológicas. Afortunadamente, existen muchas formas de sustituir la mantequilla. Algunas de estas alternativas no sólo son más asequibles, sino que también pueden enriquecer tus comidas con nuevos sabores y mejorar tu salud.
GhÃ: un sustituto tradicional de la mantequilla
El ghee, mantequilla clarificada, se encuentra entre los sustitutos más populares, especialmente para quienes tienen problemas con la lactosa. Aunque el ghà no se encuentra entre las opciones más económicas, su producción casera es sencilla. Además, aporta a los alimentos un sabor más rico y una mejor humedad. Sin embargo, se debe ajustar la cantidad de harina y líquidos de la receta para lograr la consistencia deseada.
El aceite de oliva y el de coco como alternativas saludables
El aceite de oliva se utiliza a menudo cuando queremos resaltar los tonos frutales o de nuez en un asado. El aceite de coco, por otro lado, es ideal para postres dulces, porque su sabor característico puede aportar una dimensión única. Sin embargo, al utilizar estos aceites hay que tener en cuenta que su textura puede afectar al resultado final de la comida.
Requesón: una opción ligera y nutritiva
Si buscas algo realmente saludable, el requesón puede ser una gran solución. Tiene menos grasa que la mantequilla y puedes darle sabor con hierbas, especias o incluso frutas si quieres crear una versión dulce.
Otros sustitutos atípicos, pero útiles
Si quieres ser aún más creativo, puedes sustituir la mantequilla por yogur griego, puré de calabaza, aguacate, puré de plátano o puré de manzana. Si te gustan los frutos secos, puedes enriquecer tus comidas con mantequillas de frutos secos caseras, pero cuidado con el mayor contenido calórico y graso. Para quienes son alérgicos a los frutos secos, la mantequilla de girasol, que tiene menos grasas y calorías, es una excelente opción.
Margarín: no siempre es la mejor opción
Aunque pueda parecer que la margarina es un simple sustituto de la mantequilla, no lo es del todo. El margarín suele estar muy procesado industrialmente y no sólo no sabe a mantequilla, sino que tampoco la supera desde el punto de vista nutricional. Por tanto, es mejor evitar la margarina y buscar mejores opciones a la hora de buscar un sustituto de la mantequilla.