La primavera ha llegado definitivamente a Eslovaquia y ya comienzan los primeros trabajos de jardinería en las parcelas. ¿Te preguntas cómo plantar fresas para poder disfrutar de sus deliciosos frutos? Cultivarlos no es fácil, pero si sigues una regla, obtendrás una rica cosecha.

Tanto los niños como los adultos adoran las fresas, por lo que no es de extrañar que mucha gente quiera cultivarlas en su jardín. Son útiles no solo para comer fresas frescas, sino también como fruta para mermeladas, mermeladas y zumos. ¿Cómo plantar fresas para que crezcan sanas y no se pudran?

¿Cuál es el mejor lugar para cultivar fresas? Dales la compañía adecuada y seguro que darán muchos frutos

Antes de plantar fresas, no olvide cavar y desyerbar bien la tierra. De lo contrario, si las malas hierbas absorben los nutrientes del suelo, las fresas crecerán y producirán mal. Vale la pena cubrir el suelo con agrotextil para evitar el crecimiento de plantas no deseadas.

Las fresas crecen mejor en suelos fértiles y ricos en humus con un pH de 5,5 a 6,2. Les va mal en suelos arcillosos, húmedos y pesados. La ubicación ideal es soleada y protegida del viento. Buenos vecinos para esta fruta serán la lechuga, los rábanos, la remolacha, la zanahoria, las espinacas y la valeriana.

¿Cómo cultivar fresas? La «regla del 30%» te garantizará fruta dulce

Si estás interesado en cómo cultivar fresas, no olvides una regla que te garantizará una cosecha rica y saludable. Una planta plantada en el suelo no debe tener raíces demasiado largas, por lo que si la plántula se ha extendido demasiado, deberás alcanzar las tijeras de podar. Sin embargo, recuerda que no debes acortar más del 30% de la longitud de las raíces, de lo contrario la planta plantada morirá. Las fresas se plantan de marzo a junio y puedes cosechar los primeros frutos después de 7 semanas, pero para mantenerlas sanas y jugosas, vale la pena un poco de ayuda. Para ello, puede preparar un fertilizante de ortiga casero y así asegurarse de obtener una rica cosecha.

Artículos relacionados:

Vierta agua tibia sobre tres hojas. Los tomates no caben en tus manos.

Mi mamá lo rocía sobre los tomates. Gracias al método natural, no están expuestos a enfermedades.