Las orquídeas son las plantas favoritas de muchos eslovacos en macetas. Sus flores inusuales de varios colores y pétalos delicados son una auténtica decoración de cualquier interior. Sin embargo, su floración puede ser un fenómeno esporádico, produciéndose como máximo una vez al año. ¿Existe alguna forma de disfrutar de sus flores casi todo el año? Aquí hay algunas reglas de cultivo que pueden ayudarlo a lograrlo, con énfasis en el tema clave del riego.

Durante el otoño y el invierno, las orquídeas entran naturalmente en estado de letargo, lo que provoca una pausa en la floración. Pero eso no significa que no debas preocuparte por ellos. Gracias al cuidado adecuado, las orquídeas pueden florecer con más frecuencia, no sólo en primavera. Sin embargo, hay ciertos factores que pueden afectar a su floración y que no siempre se conoce. El mayor de ellos es la cuestión del riego.

El secreto de las hermosas orquídeas.

Fertilizar las orquídeas es extremadamente importante. Se debe realizar cada quince días utilizando una nutrición especial diseñada para estas flores. Sin embargo, antes de su uso, conviene diluir el nutriente a la mitad de la dosis recomendada. También puedes utilizar un fertilizante foliar o un spray.

orquídeas como plantas nativas de los trópicos Requieren una humedad elevada, que no siempre es posible conseguir en nuestros hogares, especialmente en invierno. Por ejemplo, la orquídea Phalaenopsis necesita una humedad del aire del 40 al 70%, mientras que en invierno la humedad del aire en nuestras casas no suele superar el 30%. Por ello, se recomienda utilizar humidificadores de aire.

A veces una orquídea no florece debido a una ubicación inadecuada. Debes colocarlo en un lugar donde reciba luz solar brillante pero difusa. El mejor lugar será el alféizar de la ventana este u oeste. En el caso de una ventana orientada al sur, se debe tener cuidado de proteger la planta de la luz solar directa.

¿Con qué frecuencia regar las orquídeas?

Las orquídeas se deben regar una vez por semana durante el período de inactividad, es decir, cuando no crecen ni florecen. Sin embargo, si notas la aparición de cogollos, deberás aumentar la frecuencia de riego a dos veces por semana. Sin embargo, no olvide que la orquídea debe tener un período «seco» entre riegos. aparte de eso la maceta en la que crece la orquídea debe tener orificios de drenajeporque la orquídea no florece bien cuando se sumerge en agua.

Artículos relacionados:

Añade unas gotas y tu orquídea florecerá incluso en el clima más frío. ¡Quedará como nuevo!

¿Estás trasplantando una orquídea? Presta atención a 3 cosas. Un error es suficiente para perder todas las flores.