¿Qué hacer si la ropa no huele a fresco después del lavado? Los errores más comunes y cómo solucionarlos
El olor de la ropa después del lavado puede ser una sorpresa desagradable que aflige a los propietarios de lavadoras, ya sean modelos antiguos o nuevos. Si has notado que tu ropa no huele a fresco después del lavado, no es buena idea posponer este problema. El olor sólo puede empeorar con el tiempo. En este artículo descubrirás cuáles son los errores más comunes que pueden provocar un olor desagradable en la ropa recién lavada, y al mismo tiempo aprenderás cómo solucionarlos fácilmente ¥.
La limpieza de la lavadora es la base.
Con el tiempo, en el interior de la lavadora se pueden acumular restos de agua, depósitos de suciedad y depósitos, lo que provoca la formación de moho y la multiplicación de bacterias. Estos factores suelen ser la causa de los olores que se transfieren a la ropa. La solución es limpiar periódicamente la lavadora.
Prepare una solución limpiadora: mezcle 0,5 litros de agua limpia con una cucharada de vinagre. Limpie a fondo las juntas de goma, el filtro y el dispensador de detergente con esta solución. Luego haga funcionar la lavadora vacía en el programa económico. Cuando todas las piezas estén secas, puedes seguir lavando la ropa.
Llenar el bidón correctamente
Para que la ropa quede perfectamente limpia durante el lavado, necesita espacio. Si el tambor de la lavadora está demasiado lleno, la lavadora no podrá eliminar eficazmente toda la suciedad y los olores. Asegúrese de no sobrecargar el tambor y respete la cantidad recomendada de ropa.
Dosis óptima de detergente
Una cantidad excesiva de detergente puede provocar que sus residuos queden en los textiles, lo que provoca la formación de moho y olores. Por el contrario, una cantidad insuficiente de producto no podrá eliminar todas las impurezas. Utilice siempre exactamente la cantidad de producto que se indica en las instrucciones de uso.
Alta temperatura del agua
A veces una temperatura de lavado demasiado baja puede ser un problema. Aunque las bajas temperaturas protegen los textiles, también pueden contribuir a la conservación de olores o a la formación de manchas de humedad. Si es necesario, reduce la temperatura a una temperatura más alta, pero no olvides revisar la etiqueta de la prenda para saber si la prenda aguanta.
No dejes ropa mojada en la lavadora.
Después del lavado, debes sacar inmediatamente la ropa de la lavadora. Si lo dejas dentro por mucho tiempo, puede provocar un olor desagradable. Si no tienes la oportunidad de sacar la ropa enseguida, utiliza la función de inicio diferido para que el lavado finalice en el momento en el que puedas sacarla.
Resolución de problemas y prevención.
Cuando descubras qué está causando el olor en tu casa, comienza a solucionarlo de inmediato. También recomendamos limpiar la lavadora con regularidad, idealmente una vez cada cuatro meses con vinagre, que elimina depósitos y bacterias. De esta forma evitarás que vuelva el olor.