Consejos útiles

¿Sabes cómo guardar la ensalada en el frigorífico? Con la lechuga y el tomate todos cometemos este error y se echan a perder enseguida

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Volvamos a hablar de conservar las verduras en el frigorífico, sobre todo de la lechuga y el tomate, ya que muchos cometemos siempre los mismos errores que hacen que se estropeen más fácilmente.

Como también hemos tenido oportunidad de explicar en otras ocasiones, cada apartado del frigorífico proporciona un tipo de conservación diferente dependiendo del alimento. La parte inferior de nuestro electrodoméstico siempre está destinada a almacenar verduras, frutas y verduras. Hoy centraremos nuestra atención en la lechuga y el tomate.

Hay reglas en este sentido que debemos seguir necesariamente para asegurarnos de que cada alimento se coloque dentro del electrodoméstico, porque podrían estropearse incluso antes de lo esperado y por tanto tener el efecto contrario.

Cuidado con cómo guardas la lechuga y el tomate en el frigorífico

Cuando hablamos de alimentos frescos como la lechuga y el tomate, lo primero que debemos tener en cuenta es el de Guarda estos dos alimentos en la parte inferior del frigorífico.o en el cajón específicamente diseñado para tal fin.

En cuanto a la lechuga, te aconsejo no lavarla inmediatamente, sino posiblemente sacarla de la bolsa de plástico que te proporcionó la verdulería y luego colocarla dentro de una bolsa de papel como la bolsa de pan y luego colocarla en la parte baja del frigorífico. . El tomate hay que colocarlo en el estante situado en el cajón o en el interior.pero preferiblemente colocado en un bol.

En ambos casos, coloca un paño de algodón en la base del cajón porque este absorberá la humedad, manteniendo tus alimentos más frescos. Esto no termina aquí.

¿Qué hacer cuando compramos lechuga en bolsa?

Otro caso diferente es el marcado por las lechugas dentro de la bolsa, o las famosas ensaladas preparadas. Dependiendo de la cantidad de ensalada en bolsa que compremos, por tanto, debemos actuar de forma diferente ya que este alimento no suele necesitar ser lavado antes de servirlo en la mesa.

Solo queda coger un bol que podamos tapar pero que al mismo tiempo deje entrar aire, dentro de él colocamos la lechuga la cual hay que colocar en el antepenúltimo estante del frigorífico, para que se conserve más fácilmente y evitar la formación de condensación. Por último, sólo queda recordar atentamente este consejo fundamental: la ensalada ya preparada siempre es mejor consumirla en una sola comida; en caso contrario, conservarla durante un máximo de 48 horas.

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Marina García
¡Hola! Soy Marina García, escritora de arte de la jardinería, amante de la cocina y defensora entusiasta de los consejos útiles.