Mucha gente considera que las bolsitas de té son de mala calidad y tienen miedo de beberlas.
Sin embargo, los expertos dicen que el té en bolsas no tiene nada de dañino.
Tres conceptos erróneos sobre las bolsitas de té
En primer lugar, la afirmación de que el té en bolsas se elabora a partir de residuos industriales es totalmente infundada.
Este mito surgió debido a que al hacer bolsitas de té se utilizan hojas finas. Y lo utilizan porque es el formato más cómodo para una preparación rápida.
Además, no tiene sentido empacar una hoja grande: una vez en una caja apretada, de todos modos se romperá.
El segundo mito es la gran cantidad de tintes. Mucha gente nota que al preparar té en bolsas, el agua se oscurece rápidamente y la taza adquiere un color intenso.
Sin embargo, esto no se debe en absoluto a los colorantes (que no están presentes en las bolsitas de té), sino al uso de té de grano fino, que se prepara más rápido. Y no debemos olvidar que el té en sí es un buen tinte.
También existe la opinión de que el té en bolsas tiene un sabor inferior al del té en hojas sueltas. Pero incluso el té de hojas sueltas de muy alta calidad resultará insípido si no se siguen la tecnología de preparación.
Es muy importante utilizar agua de buena calidad y dejar reposar la bebida durante al menos tres minutos. Además, no reutilices la bolsa.
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