Consejos útiles

Aprenda a almacenar el ajo a la antigua usanza. Dura mucho tiempo

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El ajo se considera una de las verduras más saludables. Si se cultiva solo, es aún más valioso. Sin embargo, para conservar sus propiedades nutricionales y gustativas durante más tiempo, es necesario almacenarlo adecuadamente.

¿Cuándo se debe cosechar el ajo para que sus bulbos sean grandes y sabrosos y cómo se deben almacenar para conservarlos frescos por más tiempo? Puedes encontrar toda la información en el artículo.

¿Cuándo debemos cosechar el ajo?

La recolección del ajo depende de las variedades de esta hortaliza, que puede ser de primavera o de invierno. Las primeras, que se plantan en primavera, se recolectan a finales de verano y otoño, de agosto a septiembre. Por otro lado, el ajo plantado el pasado otoño se cosecha en julio. Sin embargo, estas son sólo fechas del calendario general, ya que mucho depende de las condiciones de cultivo individuales.

Las condiciones climáticas son importantes. Las altas temperaturas de este año han acelerado la vegetación y el ajo se está recolectando antes. Pero tenemos que vigilar de cerca nuestras plantas para saber cuándo el ajo está listo para cavar.

¿Y cómo podemos saberlo? Cuando la mitad de las hojas estén secas y amarillas y los tallos florales restantes estén rectos, entonces el ajo estará listo para cosechar. También deberías mirar las bombillas. ¿Qué puedes hacer para hacerlos más grandes?

Formas de conseguir bulbos de ajo grandes

Cuando descubras que se acerca la fecha de cosecha del ajo, debes hacer dos cosas. 2 semanas antes de la excavación planificada de las cabezas, deje de regar el ajo; las cabezas secas no se pudrirán y resistirán mejor el almacenamiento prolongado.

También aprox. 2 semanas antes de la cosecha se atan las hojas de ajo, lo que estimula el desarrollo de las partes subterráneas de la planta. Esto hará que los bulbos sean más grandes y fuertes.

No te pierdas la fecha de recogida. Las cabezas que se dejan en el suelo durante demasiado tiempo pueden comenzar a agrietarse y las vainas crecerán hacia afuera. Tal ajo no será adecuado para un almacenamiento más prolongado.

¿Cómo almacenar el ajo?

Las cabezas de ajo grandes pero aún compactas están listas para ser cosechadas. Después de excavar, conviene colocarlos al sol o, en caso de mal tiempo, en una habitación seca y aireada. Los cabezales libres de humedad se limpian de suciedad y se cuelgan para que se sequen más. Después de unas tres semanas, el ajo debería estar seco y listo para almacenarse.

Para ello, el método tradicional, utilizado desde hace siglos, es ideal. Se trata de trenzar bulbos de ajo. Los tallos se entrelazan entre sí y cada vez se unen más bulbos entre sí, de forma similar a un trenzado. Este método permite que el aire circule entre los bulbos.

Los bulbos también se pueden atar en un «ramo», colocarlos en una caja con ventilación o cubrirlos con harina y colocarlos en una caja. Cualquiera que sea el método que elijas, guarda el ajo en un lugar seco, con sombra y preferiblemente fresco.

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Marina García
¡Hola! Soy Marina García, escritora de arte de la jardinería, amante de la cocina y defensora entusiasta de los consejos útiles.